Consiste en aplicar sobre todo el cuerpo una capa de aceite de cacao con un exfoliaste, en un ambiente apacible con una luz y música muy tenues.
Luego, se deja actuar unos 20 minutos en una envoltura de plástico para que sus propiedades penetren en la piel y su suave aroma embriague los sentidos. Por último, se retira la máscara de chocolate con un suave masaje.
El resultado a primera vista es una piel tersa, suave e hidratada; pero, sobre todo, un profundo estado de tranquilidad y felicidad interior.
El resultado a primera vista es una piel tersa, suave e hidratada; pero, sobre todo, un profundo estado de tranquilidad y felicidad interior.
Al retirar la capa fina de chocolate se realiza un masaje de drenaje que ayuda a descongestionar la piel y eliminar la reteneción de liquido.
Recientemente, existen otras modalidades en cuanto a la aplicación de la chocoterapia como son los baños o los masajes con crema batida.
En cualquier caso, lo importante es que el cacao entre en contacto con la piel y le atribuya todas sus propiedades.
Este tratamiento es recomendable para casi todo el mundo con excepción de aquellos que tienen la piel quemada por el sol o con heridas, ya que el chocolate podría irritar aún más y aquellas que sufren de alergia a este alimento o alguno de sus componentes
Este tratamiento es recomendable para casi todo el mundo con excepción de aquellos que tienen la piel quemada por el sol o con heridas, ya que el chocolate podría irritar aún más y aquellas que sufren de alergia a este alimento o alguno de sus componentes
Los beneficios son:
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